
Por Thomas Jimmy Rosario Martínez
Los vegabajeños siempre han honrado sus sentimientos y sentido de pertenencia con su musa. El que le da su gentilicio, ha sido unos de los temas obligados. Antes no se mencionaba el nombre o el adjetivo de vegabajeño o se desviaba su contenido hacia su gente o su naturaleza, como en nuestro primer poeta conocido, José Gualberto Padilla. Pero todos los demás han sido constantes en dedicar versos a este lugar del planeta. Otros no vegabajeños, como Luis Llorens Torres, también ha sido generoso con el pueblito de antes.
Israel Cortés Ríos, “Juaniquillo” para sus amigos, estuvo presente toda su vida en Vega Baja. Cuando emigró a Nueva York por un corto tiempo, lo hizo obligado moralmente por la obligación por su familia. Eso le deprimió y enfermó. Regresó a su pueblo y pudo completar su ciclo en este plano. Su fallecimiento, después de las complicaciones con la diabetes, nos entristeció a todos los que le conocimos.
En su poemario Poesía Sentimental encontramos las huellas de su alma. Vertió su corazón en cada verso. Unos dedicados a la gente que amó y a los que admiró, otros al concepto vegabajeñista en toda su expresión. Desde el punto de vista histórico, marca gente y momentos que se vivieron y se sintieron en su pueblo natal.
“A Vega Baja”, título que le dio a varios de sus poemas, es una muestra de su pensar, pero hay mucho más. Podemos y debemos volver a visitar esta y otras de sus poesías y las de los demás poetas, hasta que todos aprendamos cómo se forma el vegabajeñismo.
A Vega Baja
Por Israel Cortés Ríos ( Juaniquillo)
Nadie puede quitarme lo que ansío
lo que ha sido mi empeño
robarme el corazón, vegabajeño
porque es mío.
No se intente pecar, con ojos fríos
ni siquiera tocar con una hoja
no ven mi alma como se deshoja
ante el silencio cruel de los impíos.
Con mi única alma de quererte
no me arrepentiré de haber hurtado
lo que mi musa, siempre había soñado
antes del día final de mi muerte.
Categorías:Vegabajeñismo
Hermoso pensamiento hecho poema.
Muestra su amor por su pueblo.