Añoranza
Tantos años hace que no estás,
PERO ESTAS.
Tantos años sin escuchar tu voz
tus palabras, tus consejos.
Aunque tu vida ejemplar fue mejor
que mil vocablos
añoro tu ronca y pausada voz.
Tantos años sin ver tu sonrisa
tu dulce mirar, tu blanca tez,
tantos años sin sentir tu calor
Tantos años en que todo enmudeció.
Tantos años guardando el gran tesoro
que me dejaste
tu ejemplo, tu dulzura, tu paciencia
tu gran amor por los tuyos
y por los no tuyos.
Tantos años, hace madre que no estás,
PERO ESTAS.
Te amo.
Rosín
Categorías:Literatura Vegabajeña, Vegabajeñismo
Deja un comentario