Foto por Thomas «Jimmy» Rosario Flores

Por Thomas Jimmy Rosario Martínez

El Diario Vegabajeño surgió en mayo de 2006 como una respuesta a la provocación hecha a este pueblo por un grupo de vegabajeños y no vegabajeños que estaban hurtando las arcas municipales y se estaban robando el vegabajeñismo.

Cuando ganó el alcalde Edgar Santana la alcaldía me dediqué a hacer el bien por nuestro pueblo, asesorando a él y algunos funcionarios públicos sobre materias de derecho municipal, haciendo de escritor fantasma detrás de discursos oficiales y material cultural. Luego me trasladé a la Legislatura Municipal bajo la égida del Presidente DR. Reinaldo Del Valle  hasta que el próximo presidente, Iván Hernández, dijo no necesitarme.

La idea del diario no era de un diario ni era mía, sino de mi padre, periodista nato, quien sentía una ausencia de la huella permanente que deja la historia. Mi motivación fue crear un foro para poder exponer la historia pasada y el momento que acontecía, que eventualmente se convierte en historia. 

Hay una diferencia entre hacer reportajes periodísticos y escribir historia.  La verdad puede ser la misma, pero la inmediatez del trabajo periodístico y mucho más cuando es diario, permite que las noticias se traten sin el rigor que requiere la historia. Ambas destrezas tienen sus métodos y sus fuentes y la confiabilidad puede ser tan sólida para un periodista como por un historiador. La historia parece necesitar una certeza absoluta aunque no siempre es así; el periodismo puede crear trabajos tan veraces como las historias responsables.

En 2006 optamos por un periódico y escogimos el periodo más corto para producirlo que es el diario. Cada 24 horas teníamos que tener una producción completa con noticias y comentarios sobre el tema exclusivo de Vega Baja. Eso implicó hacer una red de informadores y colaboradores. Los nombres de cada uno de ellos, excepto los llamados de la resistencia, están en alguna de las casi 5,000 ediciones que hicimos en 12 años.  Lo que al principio hacíamos en digital y papel, por los costos de la impresión, tuvimos que seguirlo en digital y de ser una aventura diaria, pasó a una de a toda hora. El nombre lo tuvimos que modificar a Diario Vegabajeño de Puerto Rico cuando comenzamos a trabajar temas estatales e internacionales dado el orígen de los que nos hacían de favor de accedernos e intercambiar ideas e informaciones. En un momento dado, los escritos de nuestro diario estaba dando vueltas por todos los países del mundo y eran más nuestros lectores en Estados Unidos que en Puerto Rico. 

Ese trabajo sin descanso nos agotó. Desafortunadamente, no encontramos quien lo siguiera con la responsabilidad y el compromiso de no dejar un día sin publicarlo. Y ante un nuevo panorama en nuestra vida personal, teníamos que hacer pausa. Si lo hubiéramos detenido por un tiempo, nunca hubiéramos parado. Por eso planificamos convertirlo en el proyecto de enciclopedia que comenzamos casi simultáneo como una columna dentro de El Diario Vegabajeño hasta que hicimos una sección cibernética separada.

Las enciclopedias en colecciones de libros por temas o orden alfabético, antes eran la principal fuente de información. En casi todas la casas había una. Mi abuelo Pipo tenía la extraordinaria Colección Espasa-Calpe de más de cien volúmenes y en mi casa estaba The New Standard Encyclopaedia. Mi padre luego adquirió la Enciclopedia británica en inglés y muchos años después en español.  También teníamos la Enciclopedia de Clásicos Jackson y posteriormente adquirimos la Enciclopedia de Puerto Rico. Luego vivieron algunas en digital. Teníamos todas las que salían.

Las enciclopedias digitales quedaban obsoletas casi inmediatamente que uno las compraba y ponerlas al día eventualmente era muy costoso para los editores, por lo que había que complementarla con la información que había en la red de Internet. Luego salió Wikipedia, una enciclopedia de poca confiabilidad que todos buscamos para que nos brinde  la primer idea de todo. 

Al dejar atrás el Diario Vegabajeño de Puerto Rico, hemos retomado la Enciclopedia Vegabajeña. Para los que no lo saben, hay una Enciclopedia de Puerto Rico excelente, gratis y disponible en    enciclopediapr.org . La nuestra no pretende imitar a aquella, de hecho, la Vegabajeña fue primera y tiene una organización y propósitos distintos. 

En la Enciclopedia Vegabajeña pretendemos rescatar la historia de Vega Baja y de los vegabajeños. Los sucesos, las personas, nuestro entorno, las ideas, la cultura, la idiosincracia, en fin, todo es importante. En ella  solidificaremos  la estrella del vegabajeñismo que existe antes de que yo creara la palabra para fines de llamar de alguna manera, a  lo que muchos nos hemos dedicado por décadas con desprendimiento,  felicidad, amor  y hasta con fanatismo.

Vega Baja tiene un comienzo del que no estamos seguros pero lo que sabemos con certeza es que la Enciclopedia Vegabajeña será una tarea de nunca terminar, porque la historia se renueva a cada momento con el presente. Lo nutriremos también cuando recordemos nuestras omisiones o reconozcamos  aspectos de nuestro pasado común que nunca antes pudimos estudiar. Y procuraremos que las nuevas generaciones respeten nuestro sentido de pertenencia y le den continuidad perpetua a este trabajo.

La Enciclopedia Vegabajeña debe convertirse en el espacio de unidad de los vegabajeños. Trataremos la pureza de su contenido y el buen sentido para que nos sirva a todos.

Categorías:Historia Vegabajeña ¿Por qué?, Opinión, Thomas Jimmy Rosario Martínez, Vegabajeñismo